sábado, 5 de mayo de 2012

TABACO


Su aceptación cultural considera a su consumo en primer lugar como una fuente de placer y en segundo como un simple vicio o mala costumbre. Se ha determinado que los cigarrillos y otros productos de tabaco, tales como cigarros puros, tabaco para pipa o rapé (en polvo), son adictivos y que la nicotina es la droga del tabaco causante de adicción. Además, se sabe que el tabaquismo es un importante causal de accidentes cardíacos y cerebrovasculares, y ocupa los primeros lugares entre los factores que provocan cáncer. La nicotina provoca una de las adicciones más potentes, desarrollando en el fumador un conjunto de signos y síntomas denominado síndrome nicotínico. A mayor cantidad de signos o síntomas presentes, mayor porcentaje de posibilidades de estar frente a un adicto nicotinómano.
Síndrome nicotínico: signos y síntomas de adicción a la nicotina
Alto consumo diario de cigarrillos (15 o más por día).
Fumar cigarrillos con alta proporción de nicotina, insatisfacción o aumento del consumo al cambiar a "suaves" o "light"
Inhalación profunda del humo.
Fumar desde las primeras horas del día, o hasta el momento previo al sueño
Padecer compulsión tabáquica: no soportar unas pocas horas sin fumar; interrumpir otras tareas o entretenimientos para fumar o comprar cigarrillos.
La nicotina es un alcaloide extremadamente adictivo, que actúa como estimulante y sedante del sistema nervioso central. Su ingestión tiene como resultado un estímulo casi inmediato porque produce una descarga de epinefrina de la corteza suprarrenal. Esto estimula el sistema nervioso central y algunas glándulas endocrinas, lo que causa la liberación repentina de glucosa. El estímulo va seguido de depresión y fatiga, situación que lleva al toxicómano a buscar más nicotina. La nicotina se absorbe con facilidad del humo del tabaco en los pulmones y no importa si éste humo procede de cigarrillos o de puros. También se absorbe fácilmente cuando se masca el tabaco. Con el uso regular, se acumulan concentraciones de nicotina en el cuerpo durante el día, que persisten durante la noche. Por lo tanto, las personas que fuman cigarrillos a diario están expuestas a los efectos de la nicotina 24 horas al día. La nicotina absorbida al fumar cigarrillos o puros tarda sólo segundos en llegar al cerebro, pero tiene un efecto directo en el cuerpo hasta por 30 minutos.
Adicionalmente, los problemas afectan a terceros que inhalan el humo ambiental del tabaco (fumadores pasivos). Se ha demostrado que este humo causa cáncer de pulmón y aumentan significativamente los casos de ataques asmáticos, infecciones cardio respiratorias y muerte súbita.

Los fumadores se exponen a padecer aterosclerosis, enfisema, patologías broncopulmonares, cáncer en boca y en las diversas porciones del sistema respiratorio, como así también diferentes manifestaciones de enfermedad coronaria. También tienen mayor riesgo de desarrollar infarto de miocardio y angina inestable. 

efectos: adicción, con problemas con el corazón, la laringe, el esófago, la vejiga, el páncreas, el riñón y la boca, cáncer pulmonar, enfisema y bronquitis crónicas, aborto espontaneo, niños nacen pesando poco.




ALCOHOL


Esta adicción afecta a todas las clases sociales, dado que en las clases altas el consumo es extensivo. No se puede atribuir una explicación única de las toxicomanías, ya que influyen problemas sociales tan variados como el delito, los problemas familiares, el desempleo o la salud. La adicción al alcohol posee aspectos culturales importantes desde el momento en que el consumo es lícito y los menores, a pesar de las prohibiciones, no tienen problema para consumirlo.
El entorno familiar puede ser determinante: ante la situación familiar distorsionada el sujeto erige defensas psicológicas contra la ansiedad. Por otra parte, los menores tienden a seguir el ejemplo de sus mayores. Otros motivos del alcoholismo son los deseos de evasión y de autodestrucción, dados el gran número de suicidios que presenta esta enfermedad.
Los efectos del alcohol son inmediatos debido a que es absorbido casi instantáneamente, pasando directamente al torrente sanguíneo. Al llegar al cerebro, narcotiza las neuronas dificultando primero e impidiendo luego la comunicación entre ellas. Esto se produce en primer término en las regiones del cerebro encargadas del razonamiento y otros procesos complejos.

La tolerancia al alcohol se desarrolla en un periodo de entre 5 y 10 años, por lo que no pueden predecirse resultados inmediatos. Durante este tiempo, el adicto comprueba que con la misma cantidad o incluso más se obtienen menos resultados.  El hígado se deteriora por la absorción del tóxico, evitando parcialmente el deterioro en otras zonas del cuerpo, especialmente el cerebro. Uno de los primeros síntomas del avance de la patología son las amnesias alcohólicas que se caracterizan por ser totales. La toxicomanía alcohólica sufre varias etapas hasta llegar a su cronicidad; se han descrito cuatro fases:

a) Pre alcohólica: su duración oscila entre seis meses y dos años durante los cuales la bebida es usada para rebajar la tensión y aliviar el nerviosismo y la ansiedad
 b) Promódica: la extensión es de dos a cinco años. El alcohol pasa a ser una droga necesaria, apareciendo los primeros síntomas graves.
 c) De toxicomanía crucial: se caracteriza por la pérdida del auto control, eliminándose la capacidad inhibitoria, con conducta auto justificable del abuso del alcohol.
d) Crónica: se produce una destrucción progresiva de la moralidad, con debilitación grave de las facultades mentales, pensamiento confuso, lento y prolongado.
La recuperación del alcohólico consta de diferentes etapas. Inicialmente el tratamiento se realiza bajo estricto control médico. La terapia consiste en la total supresión de su consumo coadyuvado con dietas especiales que equilibran el organismo. Paralelamente, puede ser necesario el uso de fármacos que disminuyan los temblores nerviosos y otros síntomas de abstinencia. 

efectos: adicción (alcoholismo), mareos, nausea, vómitos, resacas, dificultad de expresión, sueño interrumpido, problemas motores, conducta agresiva, problemas al embarazo, depresión respiratoria y muerte (en dosis altas).

lunes, 30 de abril de 2012

ANFETAMINAS


El consumo de este excitante está ampliamente extendido y distribuido por todas las clases sociales. A diferencia de lo que sucede con la cocaína que la consumen preferentemente los sectores medios y altos, las anfetaminas son consumidas tanto por ejecutivos que pretenden sobreexcitación como por amas de casa que buscan un anoréxico para sus dietas o por estudiantes que preparan exámenes. Al incidir en el sistema ortosimpático causan hipertensión, taquicardia, hiperglucemia, midriasis, vasodilatación periférica, hiperpnea, hiporexia, etc. El estado de ánimo del adicto oscila entre la distrofia y la hipomanía, presentándose ansiedad, insomnio, cefalea, temblores y vértigo. Pueden aparecer cuadros depresivos y síndromes paranoides anfetamínicos.
A dosis normales, sus efectos varían de acuerdo al individuo y las condiciones de ingesta. Pueden producir efectos placenteros, hiperactividad y sensación desbordante de energía, pero también causan temblor, ansiedad irritabilidad, ira inmotivada y repentina, trastornos amnésicos e incoherencia. En la última fase se describen depresión, cuadros paranoides y delirios paranoides, alucinaciones y trastornos de conducta. El consumo de anfetaminas puede conducir a actuaciones agresivas, al igual que los barbitúricos y el alcohol, por su gran efecto euforizante, unido a un descontrol en los instintos inhibitorios.
Tales situaciones se producen cuando las dosis suministradas, generalmente por vía endovenosa, superan los 2 gr. Está demostrado un mayor potencial en las anfetaminas que en la cocaína, tanto en su punto más álgido como en la duración de los efectos. Reacciones muy graves se producen al consumirlas con barbitúricos en el conocido fenómeno de la pluritoxicomanía. Tomadas en dosis importantes son causantes de confusión, tensión, ansiedad aguda y miedo. También pueden precipitar psicosis paranoide en sujetos no psicóticos. La psicosis anfetamínica desarrollada por el sujeto se asemeja a la psicosis paranoica y a la esquizofrenia paranoica.

tipo de droga: estimulante.
forma de consumo: oral, inyectado, jalado y fumado.
efectos: adicción, irritabilidad, ansiedad, presion alta, paranoia, psicosis, depresion, agresion, convulsiones, pupilas dilatadas, mareos, falta de sueño, falta de apetito, malnutricion, altos riesgos al VIH, epatitis y ptra enfermedades contagiosas si es inyectado.


LSD


La LSD es una de las principales drogas en la categoría de los alucinógenos. Fue descubierta en 1938 y, entre las sustancias químicas que alteran el estado de ánimo, es una de las más potentes. Se fabrica a partir del ácido lisérgico, encontrado en el cornezuelo, un hongo que crece en el centeno y otros cereales.
La LSD, comúnmente llamada "ácido", se vende en la calle en tabletas, cápsulas y, a veces, en forma líquida. Es inodora, incolora y tiene un sabor ligeramente amargo. Suele consumirse por vía oral. Con frecuencia, se agrega la LSD a un papel absorbente, como el papel secante, que se divide en pequeños cuadrados decorados, cada uno de los cuales constituye una dosis.

Peligros para la salud
Los efectos de la LSD son impredecibles. Dependen de la cantidad ingerida; de la personalidad, estado de ánimo y expectativas del usuario; y del ambiente en el que se usa la droga. Por lo general, el usuario siente los primeros efectos de la droga de 30 a 90 minutos después de tomarla. Los efectos físicos incluyen dilatación de las pupilas, sudoración, falta de apetito, insomnio, sequedad en la boca, temblores y aumento de la temperatura corporal, la frecuencia cardiaca y la presión arterial.
Las sensaciones y los sentimientos cambian de forma mucho más drástica que las señales físicas. Es posible que el usuario sienta varias emociones diferentes a la vez o que pase rápidamente de una emoción a otra. Si se toma en una dosis suficientemente alta, la droga produce delirio y alucinaciones visuales. El sentido del tiempo y el de sí mismo cambian en el usuario. Las sensaciones parecen "cruzarse", dando al usuario la impresión de oír los colores y ver los sonidos. Estos cambios pueden ser atemorizantes, causándole pánico al usuario.
Algunas personas que usan LSD sufren pensamientos y sensaciones sumamente aterrorizantes, tienen miedo de perder el control, de volverse locos y de la muerte, y se sienten angustiados. Han ocurrido algunos accidentes mortales durante estados de intoxicación con LSD.

tipo de droga: alucinógena.
forma de consumo: oral o como gelatina, liquido puesto en los ojos.
efectos: temperatura y presión elevada, falta de apetito, falta de sueño, estremecimientos, alucinaciones crónicas.

CRACK


el crack se manipula con amoníaco o bicarbonato de sodio y agua, mezcla que se expone al fuego para retirar el clorhidrato la sustancia que queda - similar a la cocaína- puede fumarse. crack se refiere al crujido que se oye cuando la mezcla se calienta, fenómeno en el que intervendría principalmente el bicarbonato de sodio.

Reseña histórica
El crack se considera una droga altamente adictiva. Su aparición es un fenómeno reciente. En 1985, el diario The New York Times mencionó por primera vez “una nueva forma de droga llamada crack”. Un año después, esta misma publicación afirmaba que el crack era la mayor noticia después de Vietnam y la caída del ex presidente norteamericano Richard Nixon. Otros medios de comunicación llegaron a comparar la dispersión de esta droga con las plagas que diezmaron la población europea en el medioevo.
Durante buena parte de la década de los 80, los narcotraficantes de la bahía de San Francisco, Estados Unidos, vendieron toneladas de esta droga a las pandillas de las calles de Los Ángeles. Mediante el tráfico de crack, las bandas callejeras lograron obtener el dinero y las conexiones necesarias para comprar armas automáticas y hacerse de la infraestructura necesaria para sostener su negocio ilícito. Con este fenómeno fue que se abrió la primera conexión entre los carteles de la droga colombianos y los barrios mayoritariamente negros de Los Ángeles, urbe conocida hoy como la capital mundial del crack.


Aspecto: El crack se presenta en forma de rocas cristalinas de color blanco o amarillento.
Vía de administración: El crack se fuma y sus consumidores suelen hacerlo en pipas de cristal.
Efectos: Euforia, Estimulación del sistema nervioso central, Ansiedad, Miedo, Depresión, Apatía, Angustia, Sequedad de boca, Sensación de ardor en los ojos, Sudoración, Palpitaciones, Dolor de cabeza, Contracciones musculares, Aumento en los reflejos, Dilatación de las pupilas.
Efectos a largo plazo
Irritabilidad, Insomnio, Pérdida de peso, Hipertensión, Arritmia cardiaca, Temblores, Indiferencia sexual, Accesos crónicos de tos, Paranoia, Percepciones visuales miniaturizadas, Infecciones pulmonares.
En mujeres embarazadas puede provocar deterioro fetal, retardo en el crecimiento uterino, parto prematuro y otras complicaciones.